Comprobaciones tras reparar la pantalla de mi portátil

Reparación pantalla Portátil

La reparación de cualquier pieza de un ordenador portátil puede ser una tarea complicada que debe ser puesta en manos de profesionales. En CellService, una vez que hemos cambiado o reparado la pantalla siempre realizamos una serie de acciones para corroborar que la mejora ha finalizado con éxito, y que los clientes realmente van a tener una calidad en el producto después de acometer el arreglo.

Pasos para asegurarnos que la reparación de pantalla es correcta

Tras reparar la pantalla, hay que comprobar que funciona correctamente y que no ha sufrido ningún error al ser cambiada. Hay que ver que el chasis, o piezas que forman el ordenador portátil, está en buen estado y no ha sufrido ningún golpe o rayada durante el proceso de reparación. Todos los tornillos deben estar colocados en el mismo sitio que al principio y no se deben haber apretado demasiado. Este último punto es muy importante, puesto que, cuando el usuario realiza el arreglo por sí mismo, en ocasiones finaliza con varios tornillos sobrantes. Esto no puede ocurrir. Aunque aparentemente todo funciona con normalidad, a pesar de que sobren tornillos, lo cierto es que estos tienen su función. A largo plazo su ubicación sí afecta al dispositivo, de manera que todos deben ser colocados. E, insistimos, sin apretar en excesivo su atornillado.

Revisión de pantalla tras el cambio

El primer paso para la comprobación de que todo ha ido correctamente es fijarse que no haya ningún pixel muerto (puntitos negros en la pantalla). La pantalla no debe parpadear ni mostrarse demasiado oscura o con rayas. En definitiva, hay que ver que la imagen se muestre bien.

En segundo lugar hay que revisar que, tras haber cambiado la pantalla, no se ha desconectado ningún otro cable y por tanto siguen funcionando todos los componentes. Si su ordenador portátil dispone de una cámara web integrada, debe probarla. Si dicha cámara no funcionase habría que volver a cambiar la pantalla.

Por último, una vez iniciado el sistema operativo hay que comprobar que la resolución es la adecuada para poder usar el ordenador portátil. Si aparece una resolución diferente a la que tenía antes, puede ser que esa pantalla no sea la correcta y tenga que volverlo a arreglar. Si por el contrario, ha realizado todas las comprobaciones sin problema, su portátil ha pasado la reparación con éxito.